martes, 10 de junio de 2008

RR.HH.

Los recursos humanos clases aceleradas (RRHH for dummies)

Si eres el dueño o jefe de una empresa y tienes a cargo un grupo de gente, por pequeño que sea, tienes que estar pendiente de la dinámica del grupo para seguir su evolución y prepararte ante ciertas situaciones, como por ejemplo, una renuncia.
Es parte de tu labor como lider detectar los cambios en el micro-clima organizacional de tu equipo y controlar aquellas situaciones dificiles antes de que generen una crisis, y esto es especialmente cierto cuando se trata de la gestion de recursos humanos.
Si crees que esa persona es importante para tu equipo y quieres que se quede en su puesto de trabajo, debes abordarla directamente, preferiblemente en un tono ligero y sin rodeos. Pregúntale qué le pasa, si está pensando en renunciar y por qué. Eso, en la mayoría de los casos, basta para abrir la conversación y aclarar la situación.
Si el problema tiene que ver con el dinero, siempre se puede negociar un ajuste salarial de acuerdo a su desempeño.
Si la razón de su descontento es la desmotivación, tienes que evaluar si es justificada o no. A lo mejor esta persona está cansada de realizar la misma tarea todo el tiempo y es posible que reubicándola obtengas buenos resultados para ambas partes.
Pero si la persona se siente incómoda por razones que están fuera de tu control, como el ambiente laboral, la relación con sus compañeros o algún asunto personal, tienes que plantearte la posibilidad de dejarla ir. Cuando tienes a un trabajador desmotivado, a veces es imposible reorientar la situación porque su frustración impide el cambio y la única salida es que se retire de la organización.
En ese caso, debes asumirlo y prepararte para su salida, reorganizando funciones o buscando un reemplazo a tiempo.


Rista Federico